EL PRIVILEGIO DE NACER EN EL PERÚ
E n el año '99 regresaba de Argentina vía terrestre, era la primera vez que había salído fuera del Perú para visitar a mis hermanos que por mejoras económicas emigraron a ese país del Sur y ya llevaban algunos años sin volver. Habíamos pasado la tediosa frontera de Chile e inmediatamente entraríamos a la frontera peruana de TACNA. El bus internacional ORMEÑO, traía consigo a decenas de peruanos que volvían al Perú después de cinco, ocho y algunos más de diez años. Solo mi madre, mi sobrina y yo regresábamos después de tres meses. “Señores pasajeros, en 5 minutos ingresa remos a Santa Rosa, TACNA, territorio peruano”...se escuchó decir al personal de la empresa de transporte, por el micrófono interlocutor. Dicen que cuando se está afuera, aprendemos a amar y valorar a nuestra patria (aún más); y ello es una gran verdad. Nuestra frontera en Tacna hoy nos da esta bienvenida Fue indescriptible lo que vi: Todos estaban parados aplaudiendo, y acompañando la canción